"Cumplió treinta y tres años el cuatro de septiembre de 1862. Llovía su vida, frente a sus ojos, espectáculo quieto."
*
"La vida discurría en voz baja, se movía con una lentitud astuta, como un animal acorralado en su madriguera. El mundo parecía estar a siglos de distancia."
*
"Siempre jugaba solo, contra sí mismo. Extrañas partidas. El sano contra el manco, las llamaba. Tiraba un golpe normalmente y el siguiente con una sola mano. El día que gane el manco -decía-, me marcharé de esta ciudad. Desde hacía años, el manco perdía."
*
"-Volverán. Es siempre difícil resistir la tentación de volver, ¿no es cierto?"
Seda. ALESSANDRO BARICCO
No hay comentarios:
Publicar un comentario