08 septiembre, 2009

SEPTIEMBRE


Septiembre es una estación intermedia entre el verano y lo que viene después. Todavía hay tardes soleadas pero no quema el sol en las playas; se empiezan a caer las hojas de los árboles, y no huele a verano, sino a nostalgia. Septiembre se encuentra en el medio de los días como una esperanza, y como una revelación. En el fondo se nos abre una puerta a un nuevo tiempo en el que todo puede cambiar, e incluso ir a mejor.

Supongo que necesito septiempre en mi vida como no he necesitado nunca nada desde hace tiempo. Septiembre con sus connotaciones psicológicas, purificando el aire y los sentimientos , a la par que nos da ese empujón para continuar avanzando. Empiezo a olvidar, es una intuición demasiado precisa. El olvido se manifiesta en pequeñas cosas, se confunde con el paso del tiempo, se mezcla con las cosas cotidianas que saben a familia y reconciliación.

Un paseo por los escenarios de este mes-estación es como un paseo por una ciudad distinta, lejos del ayer y del mañana, como una estancia en una isla de recreo, recobrando fuerzas para labrar el porvenir.

Septiembre en mi piel, cálido y amable, con sus playas todavía llenas en las que nadie se atreve ya a bañarse por el frío, con sus paseos en bicicleta a media tarde, con sus fiestas que ponen el telón a un verano que pasó sin pena ni gloria...Y al final, septiembre es lo único que cuenta, lo único real, lo único que recordaremos.

1 comentario:

Raquel Gulías dijo...

Cuanto talento tienes! ;o) ya sabes que soy fan de tus relatos.
La foto linda, pero...se ve un poco oscura en el blog, no?